No te preocupes, ¡tenemos el truco perfecto para devolverlo a su forma original!
• Para prendas delicadas: Usa suavizante que se disuelvan mejor (como el de casa nativa 😜) para evitar manchas o residuos.
• Para resultados óptimos: Repite el proceso si es necesario, hasta que la prenda recupere su tamaño original.
¡Y listo! Con estos sencillos pasos, tu ropa estará como nueva.
• Revisa antes de secar: Antes de iniciar el ciclo, asegúrate de revisar las etiquetas de cuidado. Los símbolos son claves para evitar un riesgo.
• Clasifica por pesos: Separa tus prendas en dos categorías: ligereza y pesado. Las prendas más livianas se secan más rápido y las pesadas tardan más. ¡Optimiza tu tiempo y cuida tus prendas!
• Luz de sol: No solo cuidas al medio ambiente, sino que también mantiene tu ropa en perfecto estado por más tiempo, pero ojo, ten cuidado con tu ropa de color, prefiere secarla en un lugar que la luz no llegue directamente.