Insecticidas pueden ser químicos u orgánicos y son utilizados para matar o controlar insectos no deseados, como mosquitos, hormigas o cucarachas.
Toma dos puñados de hoja de menta, dos a tres cabeza de ajo, dos cucharaditas de pimienta, 2 litros de agua y un poco de jabón. Pon a hervir el agua dejando infusionar la menta y el ajo, junto a la pimienta. Dejar enfriar dos días, para luego añadirle jabón.
Mezcla 2 cucharadas de jabón con una taza de aceite vegetal y una taza de agua. Se echan a un atomizador con agua y está preparado para rociar las hojas de la planta que esté llena de bichos y de sus huevos.
La próxima vez que comas naranjas, guarda las pieles. Solo necesitas la cáscara de naranja, dos tazas de agua y una cucharada de lavaloza biodegradable. Pon a hervir en agua la piel de las naranjas. Agrega al atomizador y completa la fórmula con lavaloza. Es un insecticida casero efectivo contra pulgones, babosas y cochinillas.